El matrimonio de Andrea y Cristian en La Calera, Cundinamarca
Vintage Otoño Dorado 3 profesionales
A&C
09 Nov, 2018La crónica de nuestro matrimonio
Bueno, aunque tuvimos seis meses para cuadrar todo para que saliera como siempre lo soñamos, llegó el día de la boda y aún seguíamos corriendo con detalles. Mi esposa salió para donde quien le diseñó su vestido, y yo me quedé alistándome con muchos nervios. Ella me escribía y me decía que me tranquilizara, pero luego me confesó que también tenía un poco de nervios. Ya listo salí para el lugar en donde nos casaríamos, pensando en qué debería hacer, cómo la debería de recibir y cómo calmaría mis nervios.
Cuando llegué me recibió nuestro preparador de bodas, y junto con los meseros, me ayudaron a ver que yo estuviera impecable y listo para recibirla. Me tomé un trago de whisky y me dispuse a saludar a algunos familiares mientras esperaba impacientemente.
En un momento llega ella, baja del carro y las piernas comienzan a temblarme; la veo y está hermosa; veo a mi hija, que es la pajesita, y también está hermosa. Me dan ganas de llorar, pero no lo hago. Respiro fuertemente mientras ella camina con mi suegro, y luego escucho las palabras que me dice mi suegro; me la entrega y mi madre le dice otras palabras, y ya luego caminamos hacia el altar felices para recibir la bendición de Dios.
Seguir leyendo »Dos sacerdotes que oficiaron nuestra misa, que fue muy linda, nos dicen que llegaran muchas más bendiciones a nuestro hogar, ahora nuestra unió estaba aprobada y bendecida por Dios, alegría, alegría, alegría. Fotos por aquí, fotos por allá, todo mundo quería abrazarnos y hablar con nosotros, fue genial, un día de fama total.
Luego salimos de la capilla, nuestros invitados hacen un camino con luces y pasamos nosotros, de nuevo risas, alegría, alegría, alegría y fotos, una locura. Entramos al salón, vemos una decoración espectacular y la violinista tocando en vivo nuestra canción, la cual bailamos suavemente; estallan unas luces en el salón y todo mundo emocionado aplaude, sonríen y toman fotos.
Pasamos a dar nuestras palabras de agradecimiento, el brindis y, por supuesto, llega la cena para los niños y los invitados, deliciosa. A todo mundo le gustó, nadie dejó en los platos. Luego pasamos a tomarnos unos tragos, bailar y compartir con todos, tomarnos fotos y recibir regalos. Y ya llegando la hora loca, bailamos como locos, nos pusimos gafas gorros, cantamos, reímos, gritamos, saltamos y bueno, fue un día espectacular. Las fotos con un profesional muy bueno y quedamos realmente felices y un poco ebrios, pero disfrutamos al máximo.
Servicios y Profesionales del Matrimonio de Andrea y Cristian
Otros Proveedores
Otros matrimonios en Cundinamarca
Ver todas
Inspírate con estos matrimonios
Deja tu comentario